Bandas que molan (lo mejor del año)
!Que el 2007 acabe en 7!
Chen
estupideces escritas con honestidad de gorrino
Lo que favorece al enemigo nos perjudica a nosotros, y lo que nos favorece a nosotros perjudica al enemigo.Al enemigo ni agua, y si puedes coger el mando que no esté roto mucho mejor.
Jamás hay que llevar a las tropas al combate sin haber comprobado su moral, constatado que no tienen miedo y verificado que van bien organizadas. No hay que comprometerlas en una acción más que cuando tienen moral de victoria.Si tu pareja tiene miedo ni se te courra llevarla esta noche si no quieres ser motivo de mofa o burla.
Es preferible rendir al enemigo por hambre que con las armas, porque para vencer con éstas cuenta más la fortuna que la capacidad.No le pases ni patatas, sobretodo si es un suertudo.
El mejor de los proyectos es el que permanece oculto para el enemigo hasta el momento de ejecutarlo.Chico, lo de sacar a ese jugador que nadie conoce en la segunda parte no se lo digas a nadie. Lo del tiro del Halcón dándole al L1 siete veces seguidas tampoco.
Quien no se provee de los víveres necesarios, está ya derrotado sin necesidad de combatir.Que no falten las pizzas, las cervezas y las patatas, tenemos que jugar sin descanso.
Tendrás éxito si aprovechas las oportunidades propicias para atacar, serás un necio si no las aprovechas.Quien perdona, ....Maradona.
Generalmente el que ocupa el terreno primero y espera al enemigo tiene una posición más fuerte, ya que el que llega más tarde y se precipita al combate está ya debilitadoGeneralmente así juega Vico. Así que contra él nosotros jugaremos a cerrarnos y salir al contrataque.
Si es temerario, puede perder la vida.
Si es cobarde, será capturado
Si es iracundo, puede ser ridiculizado
Si tiene un sentido del honor demasiado susceptible, se le puede calumniar
Si tiene un espíritu compasivo, se le puede atormentar
La segunda cosa que acabamos de descubrir tiene que ver con unos circuitos cerebrales responsables de que podamos leer en paz un libro en un tren abarrotado de gente que circula a grandes velocidades.
Gracias a estas investigaciones sabemos, por lo menos, quienes no podrán diseñar este modelo creativo. El mecanismo en cuestión funciona del siguiente modo: en el cerebro hay unos inhibidores latentes que eliminan gran parte de la información o ruido que no tiene nada que ver con lo que estamos haciendo en un momento dado: leer un libro en el tren, bajar el e-mail o escalar una montaña. Estos inhibidores son los responsables de que podamos concentrar nuestra atención y esfuerzos. Son imprescindibles para sobrevivir. Sí, para sobrevivir… pero no necesariamente para ser creativos. Ahora resulta que varios científicos están demostrando que al pensador creativo le fallan los inhibidores y su cerebro deja, por el contrario, que penetren ideas, ruidos, paradigmas que no tienen nada o muy poco que ver con el tema en el que tiene la mente focalizada.
No me ha extrañado nada este descubrimiento porque sintoniza perfectamente con la idea bien establecida de que el gran salto adelante de la humanidad hace veinticinco mil años se dio en el momento en que surgió la capacidad metafórica:
“Mi hijo es más fuerte que el hierro” -dijo un Cromagnon- mezclando por primera vez los dominios de la biología y los materiales. El mundo aceleró su paso desde aquel momento hace veinticinco mil años.